8/9/09



Yo solamente me reía, como para ocultar mis macabras opiniones, cada vez que me preguntaban. Una y otra vez asi lo hice, me reía. Ahora que no me basta con cerrar la boca para evitar sacar a flote el pensamiento de una respuesta que pueda no ser cierta y derrumbar mi realidad, pido razones de interés. Pido con fuerza, y puede que no sea obvio, ser convencido de dar esas razones cuando alguien me pregunte que pienso de la palabra mas amplia del mundo. No "Arroz", no Otorrinolaringologia; nada de eso.

Nunca significa que aún no tenga esa risa estupida en mi con ganas de evadirlo, pero cuando tienes un espejo al alma, cuando puedes escribir y dejar de sentirte libre por voluntad propia, esas necesidades de atarte son las que al final llenan de significado cada línea que escribes de letras con sangre. No sería un hombre de principios, y no digo serlo, si no creyera en algo que remedia uno a uno mis problemas, si no creyera en el dolor. Si no creyera en el camino equivocado, no sería un escritor perdido, sino solo un perdido más en este sueño efímero.

Declaro guerra a cada uno de los que selló en tres o a veces dos palabras un compromiso. Declaro incierto el futuro del hombre que por azar busca el mágico sentimiento, mas que por ilusión...


Ahi estan, en actos de redención pura, que para nada en esta vida pueden llegar a ser interesados, las palabras que llenan de vida a una persona cuando está en lo mas profundo del lago, o en lo mas alto del cielo. La vista pierde lo agudo de cualquier forma ... Si me sirviera de algo más el simple pensar estando ciego. Pero no, es como si quisiera darle la razón a los que en un tronco dejaron un collar conservarse con el tiempo mas que con las palabras aquellas. Si creyeran ellos que en una bebida se van más de tres palabras... Es esa claridad a la que aspiro, a perseguir con voluntad, que perdura con el tiempo; más que perseguir con palabras que pueden sonar como falsas en este mundo a oidos míos construido; todo aquello que me traiga esa rosa marchita de vuelta.


1 comentario:

Ámbar dijo...

Palabras...palabras, pretendiendo decir todo, consigiendo decir nada.

Revelando el mundo al oido-lector abierto, y ocultando el mundo al mismo tiempo al oido-lector que esta más allá de uno mismo