Carta de una extraña enamorada

"Sincero". Sin algún otro apremiante hecho dentro de tu lista de quehaceres. Simplemente quiero que seas sincero. ¿Hace cuanto tiempo nos conocimos? Fue lo suficiente como para aburrirte, supongo. Nada más que desgracias trae a mi recordar el momento. Aquello significa que aún significas algo. Si durante un tiempo un día bastaba para imaginarme una eternidad contigo, no puedo contar con los días que me quedan para pensarte. Nadie sabe cuanto vive. Ni por adivinos, ni por sueños. Nadie, pues sería violar lo que en el primer instante nos unió: La incertidumbre.

Pero con el tiempo, ese pequeño sentimiento se convirtió en algo mas complicado, y me dolió haberle nombrado amor a todo lo que hicimos juntos. Ahora me recuerdas con apatía, me haces desplantes y ni siquiera me miras; cuando lo haces, o pienso que lo haces, me provoca gritarte todo lo que siento. Pero ya lo he hecho, una y otra vez. Y parece importarte lo mismo. O nada.

Quieras o no, has hecho un trabajo impresionante con toda esta actuación de hombre rogado, de fuerte y de frió, pero no puedes ser mas de lo que yo soy. De pronto solo tengas mas experiencia. El tiempo manejando la soledad o la indiferencia puede ser lo que te haga un experto frente a mi. Ahora no estoy sola, me aguardan uno que otro ángel, y tengo quien me cuide. Tu siempre vas a tener quien lo haga, no es tu problema preocuparte porque eres muy diferente a mi. Trate de corregir el vacío en tus ojos, vi correr decepción y no mas que una actitud infantil en ellos muchas veces, pero cada uno de esos momentos me enseñabas algo, como si tuvieras siempre algo con que responder, con que sorprenderme. Hiciste un retazo de mi corazón. Bordaste vida en él, cuando creí que me acompañabas en cada momento. Recuerdo tu día de abril porque sé que tus lagrimas, si han de ser vistas, sería ese día. Nadie mas sabe que de lo contrario serían falsas. Mis dudas de que seas capaz de sentir algo parecido a remordimiento son acogidas plenamente por la razón que me invade. Imagino tu expresión ahora, que estas leyendo esta carta. Imagino que algún día tendrás la necesidad de escuchar, de revivir mis palabras, por eso la he hecho pública, por eso la he metido en todas partes, para que sepas lo que es no poder dejar de pensar en alguien. Imagino que ya te ha pasado. Imagino el día en que puedas doblarte para decirme muy tarde, como siempre, lo que tengas que decir; pues te conocí en los momentos vulnerables y sé que puedes llegar a ser mas débil de lo que crees cuando se trata de vivir el momento. Tienes tanto miedo como el que tenía yo de ser lastimado, de perder en un intento todo lo que te llena. Pero tu me ayudaste a entender que aprendes a llenar tu vida con otras cosas, y que una persona llega a ser superada. Que dejas atrás el momento y que sigues, esperando que vuelva a suceder con alguna otra persona para demostrarle a la vida cuanto has cambiado. Te agradezco tus enseñanzas. Es una lástima que tus lecciones te hagan tan inasequible. No hubiera tenido que echar tantos abrazos y besos a la basura, todo ahorrados por tus facetas de orgullo heroico quien sabe para quien. No espero que me contestes, pero de seguro ya habrá pasado por tus pensamientos la forma de hacerlo, con eso me basta. Con que te hayas encontrado con lo que tengo que decir y me hayas pensado una vez mas. Sé que te irás pronto, y quisiera despedirme de ti, si no es mucho problema...

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Resulta que uno de mis "yo" imaginarios (amigos imaginarios para los niños inocentes) tiene como profesión ser psico-terapeuta. Me recomendó como solución a mi "bloqueo mental" (si, claro) escribir toda la mierda que se me ocurriera en un papel. Pues bien, resulta que mi "yo Yo" es rebelde y no usa papel, le da flojera escribir, a menos que sea en un teclado o maquina de escribir. Esto fue hecho en un teclado. Y claro, es lo mas probable dado que aparece en un blog. Pero nunca se puede descartar la idea de escribirlo en maquina de escribir, mandarlo vía fax a una compañía donde lo escaneen y lo suban como una imagen. Si alguna vez tienen dudas, solo pasen el mouse por la letritas, y si se resaltan no es una imagen. Aunque hay imagenes que tienen letras que se pueden resaltar, estilo shockwave. Asi que a fin de cuentas, uno nunca sabe. Como todo, al fin y al cabo ese 1% daña el concepto. El 1% que uno de mis "yo", el intrascendente, busca como apoyo cuando quiere derribar la objetividad de la teoría de cualquiera de los otros, el "caprichoso", el "desinteresado"; incluso al "razonable". Y es que esta hijueputa mente mía si es jodida. Porque con todos estos malparidos "yo" peleando encima, no me da tiempo ni de contestar los buenos días de la gente que saluda. Como sería si de mi dependieran los "buenos días"? Por los calzoncillos de Jesucristo, no me dan ganas de hacerlo cuando hay calma en el santuario, y ahora lo voy a hacer con tantas libélulas alrededor. Pero ya llovió, que carajos! me gusta la lluvia. Si no me gustara estaría peor. Pero mejor, quiero decir. O sea, mejor que peor, pero no peor que el "mejor que mejor". O sea, igual. Pérdoname mi vale, pero tenia que estar eso escrito aquí. Ya no se si es viernes o jueves, porque es sábado. De cualquier manera, el tiempo aquí no importa. Bueno, si importa porque si me demoro mas de lo normal haciendo este ejercicio mental, no rinde. Son solo unos cuantos minutos con el terapeuta antes que otro "yo" tome el control; pero ya se sabe lo que quiero decir con eso del tiempo. Por ahora todo esta en control, según el terapeuta. Significa que no esta para nada bajo control para los demas, que retoman una idea y la reformulan haciendo mi pensamiento mas lento antes de poder siquiera decir o escribir una palabra. Por eso es que siempre invento palabras y busco la manera mas dificil de decir o escribir las cosas, para que asi ninguno pueda favorecerse, o valerse de lo que sabe para manipular mi actuar, o mi parecer de "actuar". Ahora acabo de ver el reloj, son las 2 30 am, o sea que olvidense de la confusion entre jueves y viernes porque ya es domingo. No estoy confuso. Solo me siento confundido. Sentirse confundido no es estar confundido. Si aquello fuera asi entonces no tendria problemas porque yo me siento una persona normal, a veces. Y sin embargo tanta maroma que hago para parecerlo no basta. En algún momento se sale el "yo" bastardo, que se pone a escribir, ya que esa es la forma de expresarse. Me gusta mas la del romántico, y yo (osea, el yo bastardo) lo envidio porque aquel sabe hacer música. Y alegra las noches de los demás cuando el marica del "nostálgico/sufrido/llorón/decepcionado" se deprime. A la larga todos nosotros sabemos sufrir, pero el mando lo tiene el de la "voluntad". Por mas cagada que invente yo aquí, solo uno de nosotros decide que hacer. Bien por el, que hace lo que se le da la gana literalmente, pero bien también porque me dejo escribir esto. Debe ser para la chamba del terapeuta que viene siendo su hermano menor. Lo llaman el mas noble porque sabe como complacer a cada uno, y como salir de las tensiones, buenas o malas; logrando de nuevo el control para que el "yo - todo" pueda hablar bien, y no solo sentirse, sino ser una persona normal. Que mas milagro que ese? Bien, me despido porque me dijeron que tanto tiempo protagonizando un mundo que no existe es malo para el yo Yo y de pronto lo ponen a tomar pastillas pa' la locura (el "yo" médico dice que son capsulas, grageas, tabletas; etc pero que nunca se dice pastillas. Que fue una de las "coshitas" que aprendió; pero no le presten atención, ese se cree el mas lógico y siempre fallaría de no ser por el "yo" práctico, que al parecer es el que mas sentido común tiene)

Hora de dormir. Al fin varios minutos dejando al yo Yo correr libre en una película secreta que deleita la verdad en sus ojos cerrados.

Me he vuelto descomplicado para otros, aunque signifique la perdición de la autocomprension. Difícil tarea se me impuso, pero de eso se trata todo, de reconocer que me muevo al mismo tiempo que todos, de que el mundo no es mio y que no solo yo puedo verlo, superando baches en el camino que es la vida. Las letras con sangre son las escritas con mayor placer, porque de algún cuerpo tuvo que haber salido tanta ignorancia; y sacar esa duele mas que cualquier secreto que compartir o cualquier prototipo de culpa que la conciencia te muestre de a pedazos. He aprendido a aceptar las cosas que no puedo tener sin que esto signifique privarme del placer de quererlas, o rendirme, o resignarme. Nada de eso. Hasta hoy he ganado lo que nadie ha perdido, y por lo tanto lo que nadie ha sufrido. He transformado el ego en autoconfianza, o en la hipocresía necesaria para decir que no es igual lo uno que lo otro. Lo mas dificil de todo talvez haya sido darme cuenta de lo dificil que es en verdad estar solo, y no tener a alguien que soporte tus ideas, que necesite un pedacito de ti por dia. Supe que es casi imposible comprender a quien dice que duele no ser extrañado, esté mintiendo sobre ello o no. Contar con esas personas de siempre para responder a sus preguntas desesperadas por escuchar de mi no se convirtio en mi fuerte todo este tiempo. Lo dedique a responderme a mi mismo que espero o esperaba de todo ello, mientras el mundo que tenia armado se fue derritiendo, como un castillo de arena bajo la lluvia. Ningun santo, ningun crucifijo, ningun amuleto me pudo haber dado mejor regalo. Al haber por fin conocido el valor de mis deudas, me he propuesto citar a cada recuerdo, y pagarle tantas o mas lagrimas de las que deba. Levantarme a ser una persona sin sentimientos, pero dispuesta a sentir; puede que sea diferente a estar latente en la incertidumbre. Sé que si no he decepcionado a alguien, entonces me he cruzado tan solo a estorbar. De cualquier manera lo único que recibo de vuelta es lo mismo que he regalado: Indiferencia y olvido.

Hora de cerrar mis heridas, de darme un buen baño y de ir a dormir. Y así, al levantarme repuesto y con ganas, seguir listando en un papel las noticias, buenas o malas, de cada día.